sábado, 4 de junio de 2011

El combate del siglo

Amanece. Me levanto impulsivamente y no pienso en otra cosa.

Hoy es la noche del combate, hemos entrenado duro durante varios años esperando esta noche, esperando el combate que te deje cerrar esa puerta que ya lleva un tiempo entreabierta, sé que si no la puedo cerrar la abriré de par en par, al menos para observar lo que me espera, para saber si seré capaz de decidir mi destino.

Mi cuerpo se tensa, rompo a sudar solo de pensar en esta noche, hoy es la noche del combate.

Voy a verte por ultima vez para que me desees suerte, para que me ayudes a comprender al rival, para que me ayudes a tirar de esa puerta mágica atascada en mi interior, que no me deja salir, que no me deja ver.

De camino a ti no encuentro nada, deben ser los nervios, debe ser que estoy tan concentrado en esta noche que no veo nada mas. Hoy es la noche del combate.

Las calles vacías, las tiendas cerradas, aprovecho para golpear las señales de trafico que voy encontrando, pienso que si las golpeo con todas mis fuerzas y las tiro a la lona ganaré esta noche. Hoy es la noche del combate.

Tiro una tras otra como cutres maniquies de tienda barata, me enorgullezco de mi mismo, estoy ganando el combate de mi vida. Golpeo con rabia, pienso en el ring, en el ruido, en el olor a desinfectante y me siento vivo. Hoy es la noche del combate.

Tanto sudor derramado, tanta energia puesta en golpear al destino de una vez por todas, tantas horas de entrenamiento. Tantas amistades perdidas, tantos ratos buenos desconocidos, se que esta noche seré recompensado. Hoy es la noche del combate.

Mientras pienso en la grandeza de mi victoria llego a mi destino. Todavía no hay nadie, a mi me gusta llegar el primero y practicar mis movimientos, esa zurda que me hará ganar esta noche. Hoy es la noche del combate.

Me siento en la camilla del vestuario y empiezo a ponerme las vendas, estoy solo, pero da igual porque se que así cuando llegues estarás orgulloso de mi, veras ilusión en mis ojos, "como la de un niño en la noche de los reyes magos" dirás.

Me echo largo en la camilla a visualizar el combate, no queda nada, en 15 minutos todo comienza ya. Hoy es la noche del combate.

Caigo rendido y sin querer duermo, duermo varias horas que parecen hasta dias....

Amanece. Me despierto sobresaltado y no pienso en otra cosa.


Hoy es la noche del combate, hemos entrenado duro durante varios años esperando esta noche, esperando el combate que te deje cerrar esa puerta que ya lleva un tiempo entreabierta, se que si no la puedo cerrar la abrire de par en par, al menos para observar lo que me espera, para saber si seré capaz de decidir mi destino.........